13 enero 2012 Trinidad Vásquez
MANAGUA, Nicaragua – Este año que se inicia la Iglesia Católica espera lograr un contacto directo con el presidente Daniel Ortega y también que el nuevo Gobierno formule y aplique políticas públicas encaminadas a resolver de raíz los problemas del desempleo, inseguridad ciudadana y más acceso a la salud y educación, dijo el obispo Jorge Solórzano de la Diócesis de Granada, esta semana, aunque como institución no asistió a la toma de posesión del mandatario.
Expresa Solórzano que el año pasado se dieron buenas relaciones a través de intermediarios y no lo deseable de un diálogo directo. Reconoció los esfuerzos del Estado, "pero no lo suficiente para satisfacer al pueblo que desea vivir de manera más digna, como seres humanos y como cristianos."
Recomendó reflexionar y superar las debilidades de las autoridades. "Tiene que haber cambios en el Consejo Supremo Electoral (CSE) –dijo- al efectuarse las próximas elecciones municipales del 2012.
Las autoridades deben reflexionar sobre su comportamiento para que las instituciones sean creíbles y transparentes, porque si siguen con la misma tónica del año pasado, y la situación empeoraría hasta llevarnos a una descomposición total," comentó el líder religioso. Refirió que la debilidad no solo está en la personas que dirigen las instituciones, sino también en el sistema ideológico dependiente que existe en Nicaragua y que mantiene agobiados a los nicaragüenses.
La Conferencia Episcopal de Nicaragua (CEN), no asistió a los actos de toma de posesión del presidente Ortega, explicando el obispo auxiliar de Managua,Silvio Baez,que la invitacion por Internet les llegó tarde, el viernes 6 de enero, y por sus múltiples compromisos ya no podían variar su agenda. También aclaró que no asistieron, porque la Iglesia tiene su posición crítica hacia el gobierno de Ortega, "y eso no ha cambiado."
El discurso del primer mandatario del 10 de enero, es muy criticado por políticos opositores y juristas, porque no se refirió al contexto del país, sino que se empecinó en la agenda mundial expresando, en una parte, que es necesaria la paz, hoy más que nunca,cuando se está multiplicando el armamento atómico y se hacen llamados de guerra de parte de los mayores poseedores de arsenal militar en clara alusion a Estados Unidos.
El ex miembro de la Junta de Gobierno del 19 de julio de 1979, el doctor Moises Hassan, comentó: "habla de la paz mundial como si fuera una persona de incidencia,pero no pone reparo que en Nicaragua llega a la presidencia ofendiendo a la mayoría del pueblo,atropellando la institucionalidad,poniendo en peligro la paz."
Por su parte, el banquero Eduardo Montealegre, principal opositor a su Gobierno, expresó que su mensaje fue bastante inconsistente en los temas. Dejó claro que es un presidente ansioso de ganar legitimidad al tratar de ir alabando dignatario por dignatario.
Agencia Latinoamericana y Caribeña de Comunicación
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