22 diciembre 2010 por Trinidad Vásquez
MANAGUA, Nicaragua – En medio de la crisis económica que atraviesa el país por el alto desempleo, son miles las familias que asisten a las misas de las madrugadas conocidas como "posadas navideñas," así como otras en sus humildes hogares o en lujosas residencias ya tienen bien decorados e iluminados con arbolitos, el nacimiento del Salvador del Mundo, Jesucristo.
Hasta en las mas humildes parroquias católicas rurales así como en las ciudades, es una tradición a asistir a las cuatro de la madrugada a las posadas navideñas donde los niños van tocando un cuerno con maracas o latas anunciando que se acerca el nacimiento del niño Dios, mientras el sacerdote, a la hora de la misa, lee los textos bíblicos alusivos.
Mientras en la capital, el Gobierno y la Alcaldía, en los sitios más céntricos mantienen las calles y avenidas iluminadas con luces de colores con el nacimiento de Cristo donde aparece la imagen de María y José.
El obispo Jorge Solórzano de la Iglesia católica, ya envió un mensaje a la feligresía, llamando a cada familia a que prepare en su hogar el nacimiento de Cristo "que nos invita a la alegría y al gozo."
Exhorta al pueblo católico a vivir la navidad sin dejarse distraer por las luces y la simple diversión; "la verdadera alegría esta vinculada a la relación con Dios,"dice el líder religioso.
También eL pastor evangélico pentecostal Miguel Angel Casco, llamó a levantar la mirada para que la estrella de Belén nos ilumine y escuchemos la voz de los ángeles que anuncian a los pastores del rebaño, el nacimiento del Mesías, el Salvador.
Las Iglesias evangélicas esperan la nochebuena con un culto de acción de gracias por la venida del Redentor y después con su feligresía disfrutan de la Santa Cena.
En la Primera Iglesia Bautista de Managua, es tradición dedicar una cantata navideña con el Coro Parajon Domínguez acompañado de un coro de niños, que entonan clásicos cantos navideños, celebrando así el nacimiento de el Salvador.
En la ciudad de Blufields, capital de la Costa Caribeña Sur, a la cuatro de la madrugada durante 9 días se realizan las procesiones que recuerdan las etapas del nacimiento de Jesús.
"Esta es una fecha para que abramos nuestro corazón y Cristo crezca en nosotros. Dejemos que Jesús tome el control de nuestras vidas, de nuestras familias y de nuestras instituciones. Estamos a tiempo de recuperar nuestra fe," afirmó el padre Sánchez de la iglesia Nuestra Señora del Rosario.
La Iglesia Morava también celebra el nacimiento con una solemne liturgia de medianoche acompañada de cantos alusivos al gran acontecimiento de hace mas de dos mil años.
Agencia Latinoamericana y Caribeña de Comunicación
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