24 noviembre 2011 por Marcelo Schneider
SAN LEOPOLDO, Brasil – "Es preciso mantener la perspectiva profética de vigilancia y denuncia de las situaciones de violación de los derechos humanos y de la naturaleza, así como seguir dedicándose a las tareas teológicas y pastorales de formación de un liderazgo con los mismos principios proféticos y evangélicos," afirmó, el lunes 21 de noviembre el secretario general del Consejo Latinoamericano de Iglesias (CLAI), Rev. Nilton Giese, durante un encuentro promovido por el organismo ecuménico en asociación con el Consejo Mundial de Iglesias, en San Leopoldo.
El segundo día del "Seminario Latinoamericano de Formación en Diaconía" se dedicó a la reflexión acerca de las diferentes dimensiones de la diaconia y sus vínculos con los contextos donde se desarrolla el ministerio diaconal. Los participantes tuvieron, además, oportunidad de visitar proyectos diaconales en la región del gran Porto Alegre.
Giese habló sobre la geopolítica del continente, recordando que, en América Latina, existe la mayor y más diversa unidad vital del planeta. "Nuestras riquezas naturales nos tornan el único lugar en el mundo que tiene la posibilidad de auto sustentarse sin grandes dificultades," dijo.
No obstante, alertó al hecho de que, aún habiendo tanta diversidad de riquezas culturales y naturales en la región, así como condiciones efectivas y hasta avances en propuestas de integración regional, las perspectivas geopolíticas de América Latina y del Caribe continúan delicadas. "En los mismos moldes en que se permite la instalación de tropas militares de los Estados Unidos en territorio colombiano, los procesos democráticos en otros puntos de América Latina están siendo constantemente amenazados por fuerzas oligárquicas que utilizan, fundamentalmente, los medios de comunicación," afirmó.
Delante de esta geopolítica regional, las iglesias y los organismos ecuménicos son llamados a asumir una postura profética, afirmando que no es suficiente que nuestras sociedades tengan pisos de democracia, pero sí una base sólida en la sociedad civil que dé sustentabilidad a esta democracia. Sobre este aspecto, se tornó importante el abordaje del pastor presbiteriano colombiano Milton Mejía, que habló sobre incidencia pública y política a partir del concepto de diaconía profética.
Mejía dijo que el papel del ministerio diaconal vinculado a la incidencia también es el de retroalimentar a los líderes de las iglesias con elementos para que puedan opinar públicamente, y en nombre de la iglesia, sobre temas de debate en la sociedad. "Como iglesia, podemos ofrecer espacios para que los ciudadanos implementen proyectos de incidencia," destacó.
Al hablar sobre "Diaconía, Economía y Sociedad," el pastor Héctor Fernández, coordinador del Instituto Ecuménico Diaconal Stephen, en El Salvador, recordó que es preciso ser profético no solamente para fuera de las puertas de la iglesia, sino también para dentro. "Solamente así seremos fieles a una de las mayores contribuciones de la Reforma, que es el sacerdocio general de todas las personas que creen," analizó.
Uno de los objetivos del seminario es desarrollar un programa de formación para el ministerio diaconal y para el trabajo en conjunto en torno de esta importante tarea para las iglesias del continente.
Agencia Latinoamericana y Caribeña de Comunicación (ALC) Corresponsal de comunicaciones para América Latina y asesor del moderador del Comité Central del Consejo Mundial de Iglesias.
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