10 septiembre 2009 por Carlos Mondragón
CIUDAD DE MÉXICO – Un pastor evangélico de origen boliviano secuestra un avión en México y exige hablar con el presidente de la República Felipe Calderón, para comunicarle una "revelación divina."
Con 17 años viviendo en México, el pastor José Mar Flores amenazó a la tripulación de un avión de AeroMéxico en el que viajaba en un vuelo interno, asegurando poseer una bomba y que la haría explotar a menos que se le permitiera hablar, personalmente, con el presidente de la República para darle un mensaje divino recibido en una revelación. Dicha bomba resultó ser una lata de jugo de fruta a la que había puesto una mecha y con la que engañó a la tripulación del vuelo.
Entre sus exigencias pedía que el avión diera siete vueltas sobre la ciudad de México. Ante la imposibilidad de esto por carecer el avión de suficiente combustible, pidió también hablar con los medios de comunicación, ya alertados y movilizados por el secuestro del avión antes de que aterrizara en el aeropuerto internacional de la ciudad de México.
En su breve mensaje ante los medios, manifestó que lo había hecho como un acto desesperado para llamar la atención, aún "poniendo en peligro su propia vida," con el fin de alertar al pueblo de México y sus autoridades, y comunicarles varias profecías recibidas en revelación. Entre ellas, "que pronto habría en México una gran terremoto"; "que el último avivamiento va a surgir de México"; y que "Cristo viene pronto."
La televisión mexicana mostró videos de Internet de José Mar Flores predicando en un culto o campaña, y resaltó el hecho de que éste tiene antecedentes penales y adicción a drogas en Bolivia antes de llegar a México. El secuestrador negó pertenecer a alguna religión o secta religiosa y que sólo predicaba a Cristo.
Agencia Latinoamericana y Caribeña de Comunicación
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