13 noviembre 2008
"Por favor, recordad al mundo que no estamos ya en guerra," dijo un oficial gubernamental de alto rango de Sierra Leona a un equipo ecuménico internacional, que visitó iglesias y organizaciones ecuménicas en Liberia y Sierra Leona del 2 al 8 de noviembre.
"El mundo nos sigue mirando como si fuésemos señores de la guerra," dijo el Ministro de Comercio e Industria de Sierra Leona, Alimamy Koroma, a la delegación que visitó estos dos países de África Occidental en el contexto de la iniciativa de Cartas Vivas del Consejo Mundial de Iglesias (CMI).
Liberia y Sierra Leona fueron devastadas por guerras civiles en la década de 1990. En Liberia volvió la paz y la estabilidad tras la destitución del presidente y antiguo señor de la guerra, Charles Taylor, en 2003. En la vecina Sierra Leona, la guerra civil terminó oficialmente en 2002.
"Cartas Vivas" son pequeños equipos ecuménicos internacionales que viajan a lugares de todo el mundo donde los cristianos tratan de superar la violencia. Los miembros del equipo, que están involucrados en actividades ecuménicas y en la construcción de la paz en sus propios países, expresan la solidaridad de la comunidad del CMI compuesta por 349 iglesias en todo el mundo.
Según Koroma, el mundo ha olvidado que estos países pusieron fin a sus guerras hace unos seis años y, tras un vacilante comienzo, ambos tienen ahora gobiernos elegidos democráticamente. La presidenta de Liberia, Ellen Johnson-Sirleaf, elegida a fines de 2005, es la primera presidenta elegida en África.
Las economías de ambos países azotadas por la guerra están tratando de revitalizarse, pero el colapso actual de la economía mundial ha planteado graves problemas con la subida de los precios de los alimentos, el combustible y otros productos básicos. Además, añadió Koroma, se han encontrado coaccionados dentro del mercado mundial y los sistemas de comercio, que son inherentemente injustos y favorecen a los fuertes en perjuicio de los débiles.
Sierra Leona y Liberia figuran entre los diez países más pobres del mundo, según datos del Fondo Monetario Internacional sobre el producto interno bruto per cápita.
Tanto Liberia como Sierra Leona están trabajando constantemente por consolidar la paz que han conseguido, según se dijo al grupo de Cartas Vivas. Los gobiernos, las iglesias y las organizaciones de la sociedad civil han establecido procesos para la sanación de los recuerdos de la guerra.
Las guerras han dejado tras de sí una cultura de violencia que sigue ejerciendo efectos perniciosos en las mujeres y los niños. El Consejo de Iglesias de Liberia y el Consejo de Iglesias de Sierra Leona colaboran intensamente con organismos de las Naciones Unidas y grupos de la sociedad civil para rehabilitar a los niños de las calles, ofrecer apoyo psicosocial a las mujeres y niños que han padecido abusos sexuales, prestar asesoramiento en casos traumáticos, apoyar a las personas que viven con el VIH y el SIDA y hacer que desaparezca su estigma y enseñar la prevención.
Las iglesias han participado en diálogos interreligiosos y están tratando de hacer que se escuche la voz de las comunidades de fe en la construcción de la paz y el logro de la verdad y la reconciliación. Se han empeñado también en la educación para el voto y el seguimiento de las elecciones, así como en la construcción de capacidad.
La delegación se reunió también con el Presidente de Sierra Leona, Ernest Bai Koroma, quien confirmó la función desempeñada por las iglesias en tiempos difíciles y las instó a no cejar en su empeño, ya que no han terminado los problemas y son muchas las necesidades que se deben afrontar. Refiriéndose al Decenio del CMI para Superar la Violencia, Koroma prometió que, para 2011, Sierra Leona será un "brillante ejemplo de paz y justicia."
El líder de la delegación, el Obispo Dr. Robert Aboagye-Mensah, que es el obispo que preside la Iglesia Metodista en Ghana y miembro del comité central del CMI, destacó el poder enriquecedor de los "relatos de fe, esperanza y valentía derivados de las experiencias de personas que salen de una guerra y reconstruyen sus vidas." La visita de Cartas Vivas, añadió, "acercó de forma importante el CMI a las iglesias y las personas de estos países."
"A pesar del dolor, el sufrimiento y los horrores de las guerras civiles de estos países, nuestra visita puso de manifiesto el compromiso de las iglesias, los gobiernos y los correspondientes asociados para construir, restablecer y reconciliar, en estos países y en la región," dijo la Revda. Dra. Angelique Walker-Smith, de la Convención Nacional Bautista de los Estados Unidos de América, S.A.
Los dos jóvenes del equipo de Cartas Vivas, Anam Gill, de la Iglesia Presbiteriana del Pakistán, y James Macharia de la Iglesia Presbiteriana de África Oriental, Kenya, hablaron de los signos de esperanza y fe que han podido ver durante la visita. Como lo describía Macharia, "A pesar de los problemas, Liberia y Sierra Leona avanzan hacia un futuro de esperanza y promesa con la bendición de una fe poderosa."
Hasta el final de 2010, se realizarán visitas de Cartas Vivas cada año en todo el mundo, en el contexto del Decenio del CMI para Superar la Violencia y en preparación de la Convocatoria Ecuménica Internacional por la Paz que tendrá lugar en Jamaica, en mayo de 2011.
Más información sobre la visita: http://superarlaviolencia.org/es/iepc/visitas-de-cartas-vivas/liberia-y-sierra-leone.html.
Iglesias miembros del CMI en Liberia: http://www.oikoumene.org/?id=4618&L=4.
Iglesias miembros del CMI en Sierra Leona: http://www.oikoumene.org/?id=4635&L=4.
Consejo Mundial de Iglesias
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