23 abril 2008

LIMA, Perú – Desde el pasado 29 de febrero, Carmen Azparrent, de confesión evangélica, se encuentra recluida en el penal de Santa Mónica por presunto delito de terrorismo, en medio de condiciones carcelarias extremas.

Como se recuerda, tras participar de un encuentro organizado por la Coordinadora Continental Bolivariana, el cual fue realizado por esas fechas en Quito, Ecuador; Azparrent fue detenida en la norteña ciudad de Tumbes junto a sus acompañantes, acusados de tener vínculos con grupos terroristas.

Además de hallarse casi dos meses privada de su libertad, Azparrent está encarcelada bajo la categoría de alta peligrosidad, por lo cual sólo recibe las visitas de sus familiares más cercanos. Por si fuera poco, comparte la celda con integrantes del movimiento terrorista Sendero Luminoso, responsable del asesinato de su padre, el alcalde de Ayacucho Fermín Azparrent, en 1989.

Como consecuencia del rígido régimen carcelario en el que se encuentra, Azparrent, que es miembro de la Iglesia Metodista, ha contraído en prisión varios problemas severos de salud.

Ante esta situación, los familiares de Azparrent, naturales de Huancayo, representantes de la Iglesia Metodista y del Concilio Nacional Evangélico del Perú, y organizaciones como la Asociación Paz y Esperanza, y la Asociación Pro Derechos Humanos, vienen coordinando una serie de acciones en defensa de la hermana injustamente detenida.

Además de solicitar su libertad, enviarán pedidos al Instituto Nacional Penitenciario y al Ministerio de Justicia para que mejoren sus condiciones carcelarias mientras permanece en prisión, y solicitarán a la Defensoría del Pueblo una acción más efectiva en resguardo de los derechos de Azparrent.

Agencia Latinoamericana y Caribeña de Comunicación (ALC)