7 diciembre 2007
"El nacimiento de Jesus, el Mesias, fue asi:..." (Mateo 1:18).
Muchas generaciones despues de que Dios hubiera prometido al Mesias, una jovencita llamada Maria concibio un nino por gracia del Espiritu Santo. Un angel le dijo a Jose, el joven con quien estaba prometida en matrimonio, que el nino al que daria a luz era el Hijo de Dios, Jesus.
El poder y las bendiciones de Dios obraron por medio de vidas comunes para traernos a Jesus, el Mesias. Jose y Maria, jovenes comunes y corrientes criados por las generaciones que los precedieron, estaban abiertos a la extraordinaria actividad de Dios en sus vidas. Eran personas comunes cuyo valor y corazones dispuestos proclamaban las Buenas Nuevas de aquel que salvaria a su pueblo de sus pecados.
Innumerables generaciones despues, ustedes y yo estamos llamados a proclamar las Buenas Nuevas de Emmanuel, "Dios con nosotros." Nuestro projimo, nuestras comunidades y nuestro mundo estan llenos de quienes desean conocer el amor y la presencia salvadora de Jesus en sus vidas. Dios nos utiliza, como personas comunes y pecadoras, para traer la promesa y la luz del amor y la salvacion de Cristo.
Esta Navidad, que el Espiritu Santo les de fe, valor y un corazon dispuesto al participar en el milagro continuo de Dios. Les deseamos que conozcan la alegria y recogimiento que se siente al comunicar al mundo el amor creador y redentor de Cristo.
Rdo. Mark S. Hanson
Obispo Presidente Iglesia Evangelica Luterana en America
ELCA News Service
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