Published by the Queens Federation of Churches
Benedicto XVI Le Dio La Razón a Hugo Chávez

23 mayo 2007

CIUDAD DEL VATICANO – El presidente Hugo Chávez pidió la semana pasada al papa Benedicto XVI, que ofreciera disculpas a los pueblos aborígenes, al referirse a la afirmación del pontífice en Aparecida, Brasil, en torno a que la evangelización no fue una "imposición" ni "una alienación" de las culturas precolombinas. Hoy, el primado de Roma, le dio la razón y aseguró que "no se pueden ignorar las sombras que acompañaron la colonización y la evangelización de América latina, ni olvidar los sufrimientos y las injusticias infligidos por el colonizador a los pueblos indígenas, cuyos derechos humanos fundamentales fueron pisoteados."

En su discurso de apertura de la V Conferencia General del Episcopado de Latinoamérica y el Caribe (Celam), el pontífice había señalado que "el anuncio de Jesús y de su Evangelio no supuso, en ningún momento, una alienación de las culturas precolombinas, ni fue una imposición de una cultura extraña." El Papa también expresó que "la utopía de volver a dar vida a las religiones precolombinas... no sería un progreso, sino un retroceso."

Enseguida Chávez apareció en un discurso, diciendo: "Yo le voy a pedir con todo respeto (como) católico, y como jefe de estado, el venezolano, con la humildad de un campesino que es lo que yo soy, yo le ruego a Su Santidad que ofrezca disculpas a los pueblos (indígenas) de nuestra América. Creo que es lo correcto."

Chávez comparó la masacre de la Conquista con el Holocausto, y fue más allá, hasta se animó a decir que fue "más grave."

La constitución venezolana, modificada por el mandatario en 1999, reconoce a los descendientes de indígenas del país sus derechos originarios sobre las tierras que ancestralmente ocupan y también les garantiza el derecho a la propiedad colectiva de ellas y su participación en la demarcación de ese territorio.

En su audiencia general semanal, esta mañana, el papa alemán reconoció que la colonización de América y la evangelización de sus habitantes fueron acompañados de "sufrimientos" e "injusticias"

A diferencia de Juan Pablo II, quien en 1992, en Santo Domingo, había pedido perdón a las poblaciones indígenas por las violencias cometidas por los cristianos en la conquista de América, este Papa, no las había mencionado, lo que provocó el enojo y la indignación de las organizaciones indígenas y de los mandatarios de Bolivia y Venezuela.

Agencia Latinoamericana y Caribeña de Comunicación
Fuentes: AP y AFP

 

 


Queens Federation of Churches
http://www.QueensChurches.org/
Last Updated May 26, 2007