10 mayo 2006
BUENOS AIRES, Argentina – Judith Van Osdol, secretaria de la Pastoral de la Mujer y Género del Consejo Latinoamericano de Iglesias (CLAI), expresó su preocupación por la postura asumida por el Consorcio de Médicos Católicos que pidió al Senado argentino no ratificar el Protocolo del Comité de la Eliminación de la Discriminación contra la Mujer de las Naciones Unidas (CEDAW por sus siglas en inglés).
"Como iglesias evangélicas en la Argentina, vemos con alarma la declaración del Consorcio de Médicos Católicos y nos preguntamos si detrás de esa declaración hay ignorancia en cuanto al tema o bien se trata de una maniobra para instalar miedo sobre su tratamiento," dijo Van Osdol.
Señaló que las iglesias evangélicas siempre se han manifestado a favor de la defensa de los derechos humanos, en este caso los de las mujeres, y por lo tanto apoyan el Protocolo Facultativo del CEDAW sin modificaciones.
El CEDAW es una convención que forma parte de la Constitución de la República Argentina y del marco jurídico para tratar el tema de superar todas formas de discriminación y violencia en contra las mujeres, indicó.
Van Osdol dijo que la ratificación del Protocolo Facultativo, pone al alcance de las mujeres la posibilidad de apelar al ámbito internacional cuando los resortes nacionales no son efectivos o suficientes, para garantizar su derecho a no sufrir discriminación.
Aseguró que además establece un mecanismo que permite al Comité de la CEDAW realizar investigaciones sobre situaciones que revelen violaciones masivas y sistemáticas de los derechos de las mujeres.
Rechazó los argumentos de los médicos católicos, en el sentido que comprometería la soberanía del país. "Este instrumento jurídico no limita la soberanía nacional, ni estipula nuevos derechos, no puede limitar la soberanía nacional; sólo da eficacia para poder instrumentar el CEDAW," afirmó.
Agencia Latinoamericana y Caribeña de Comunicación
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