22 noviembre 2005
Por Héctor Carrillo

CONCEPCIÓN, Chile – "La iglesia Evangélica Luterana ha perdido su voz profética y no está siendo luz para los más postergados," admitió el pastor y secretario de la Iglesia Evangélica Luterana en Chile (IELCH), Oscar Sanhueza Rodríguez, en la Segunda Jornada sobre "la Política Social de la Iglesia" celebrada el jueves último en esta ciudad.

El líder luterano dijo que el actual sistema neoliberal es "un virus que ha sido globalizado y en la mayoría de los países dependientes, lo están sufriendo" e instó a la iglesia a "hacer su denuncia y el anuncio de la gracia."

El sistema parece ser tan cruel, que aunque un empresario quisiera pagar sueldos dignos no puede, porque la competencia lo devora. Lo anula el sistema y quiebra como empresario, dijo al referirse al sistema económico que rige en el país.

Sanhueza afirmó que el capitalismo no es una persona ni un grupo de personas, sino es una doctrina. "Por eso, las iglesias son testigos del accionar implacable de la lógica del capital financiero, dejando a nuestros pueblos fuera de la vida plena," señaló.

Precisó que las comunidades cristianas trabajan insertas entre los pobres del país con base en la práctica solidaria con aquellos que padecen hambre " porque estamos frente a un sistema que actúa sin compasión, que carece de corazón y produce muerte."

Se trata del poder al servicio de la mayor acumulación de poder, dijo Sanhueza, al tiempo de urgir a los chilenos a tomar conciencia de la realidad del país.

En la jornada, llevada a cabo en el Centro del Proyecto Social Educativo Piececitos de la Candelaria, participaron casi un centenar de profesionales educadores, asistentes social y teólogos.

Agencia Latinoamericana y Caribeña de Comunicación