12 octubre 2005 Por Antonio Otzoy
CIUDAD DE GUATEMALA, Guatemala – Las iglesias evangélicas redoblaron su ayuda a la población de este país centroamericano afectado por el paso devastador del huracán Stan que ya cobró miles de víctimas y pidieron a la comunidad internacional apoyo para atender al pueblo que sufre por la falta de alimentos y por las epidemias.
Los líderes de las iglesias lanzaron desde esta capital un dramático pedido de ayuda a sus integrantes y a la población en general a colaborar con las personas que están sufriendo los efectos de las incesantes lluvias que provocaron inundaciones y deslaves.
Muchas iglesias de las distintas denominaciones cristianas se convirtieron en improvisados albergues y centros de acopio en los que los cristianos vienen trabajando como voluntarios, afirmó el Presbiterio Central de la Iglesia Nacional Presbiteriana de Guatemala.
Desde el jueves último las emisoras locales TGN y Radio VEA coordinan con la Alianza Evangélica de Guatemala, la Asociación de Ministros de Guatemala y muchas otras instituciones cristianas, la ayuda a los damnificados.
John del Salto, de la Asociación de Ministros Evangélicos de Guatemala, pidió a todos los socios a socorrer a los damnificados y sostuvo que en las actuales circunstancias "debemos encarnar el evangelio. La religiosidad no es sólo personal, local, debe manifestarse en el amor al prójimo en acciones concretas."
El director de radio TGN, Esteban Sywulka, informó que esa emisora canceló toda la programación regular desde la semana pasada para dar paso a los llamados de ayuda y a recibir las donaciones. "Hasta el momento hemos enviado unas 100 toneladas de ayuda a las regiones afectadas," agregó.
La Alianza Evangélica de Guatemala hizo un llamado a unas 20.000 iglesias asociadas a orar por las personas que están padeciendo difíciles problemas, dijo su secretario ejecutivo, Manuel de Jesús Dionisio.
Esperamos que las iglesias sean un abrigo para todos y todas sin distinción religiosa. Los cristianos en estos casos estamos llamados a ayudar, por eso es que las iglesias en condiciones aceptables ubicadas en los lugares más afectados están trabajando, precisó.
La Conferencia de Iglesias Evangélicas de Guatemala (CIEDEG), reportó el envío de ayuda a las regiones más afectadas. Se espera llevar más ayuda mañana jueves, indicó Julián Burgos, coordinador de Gestión de Riesgos.
Las inundaciones afectaron a un 70 por ciento de las vías de comunicación terrestre y se calcula que 20 por ciento de las vías quedaron destruidas, aislando a centenares de poblados. No hay agua ni alimento, algunas personas caminan hasta cinco horas para alcanzar algo de viveres que ofrecen instituciones del Estado, particulares y personas individuales.
En la región costera del Sur del país un 70 por ciento de los cultivos está destruido, en el Occidente se perdió la mitad de los sembríos de granos básicos y otro cultivos. Las regiones Norte y Oriente son las menos afectadas.
Un reporte de la Coordinadora Nacional para la reducción de Desastres (CONRED) confirmó el 8 de octubre la muerte de 652 personas, más de 500 desaparecidos, centenares de heridos, 107.833 evacuadas a 364 albergues , cerca de 6 mil viviendas colapsadas y un total de 515 comunidades afectadas.
El huracán Stan azotó la región centroamericana y al sur de México desde los primeros días de octubre, causando mas de 2 mil muertos en humildes comunidades rurales de Guatemala y Nicaragua, donde se declaró el estado de Calamidad Nacional, y en México.
Agencia Latinoamericana y Caribeña de Comunicación
|