ene 26, 2005 Por Trinidad Vásquez
MANAGUA, Nicaragua - Los evangélicos de Nicaragua empezaron a orar para que el Diálogo Nacional, que se inció el miércoles 19, ayude a resolver la crisis del país, pero pidieron que sus iglesias participen en el mismo.
El pastor y rector del Seminario Teológico Bautista de Managua, Walt Morgan, comentó que el diálogo debe abordar los problemas más sentidos del pueblo, como son el desempleo, la salud, educación y créditos para los productores y discutir sobre las elecciones de funcionarios públicos.
Si el diálogo actúa con una agenda oculta, lo rechazo, porque solo con una discusión abierta y sincera se arreglan las crisis políticas, indicó el líder bautista.
Además, lamentó que los dos grandes partidos mayoritarios, el Partido Liberal Constitucionalista (PLC) y el Frente Sandinista de Liberación Nacional (FSLN), no tomen en cuenta a la iglesia evangélica, que representa a un gran sector de la población.
El Ministerio Apostolar Cristiano convocó a sus fieles a orar en lugares públicos, para que el Diálogo Nacional dé frutos en favor del pueblo y no a favor de los líderes políticos, que luchan por ambiciones de poder. El pastor César Augusto Marenco afirmó que la iglesia evangélica debe ser tomada en cuenta en el diálogo.
Por otra parte, Guillermo Osorno, presidente del Partido Camino Cristiano, dijo que liberales y sandinistas buscan repartirse Nicaragua. Lo que pretenden en el diálogo es distribuirse los cargos públicos en todos los poderes y apropiarse de tierras con la creación de un instituto de la propiedad, declaró.
El secretario de la Presidencia, Ernesto Leal, afirmó que el Ejecutivo no busca prebendas, sino hechos concretos que vayan en favor del pueblo, pero que teme que los partidos incumplan los acuerdos.
El cardenal Miguel Obando y Bravo, actúa como testigo del diálogo y la organización no gubernamental Etica y Transparencia fiscaliza las conversaciones. Hemos llegado a la necesidad de este diálogo por los desaciertos y los desmanes de las partes involucradas, indicó Roberto Courteney, presidente de esta organización.
El gobierno del presidente Enrique Bolaños cedió importantes facultades a los diputados participantes. Se informó que en el diálogo se revisará el presupuesto nacional y las reformas tributarias, dentro de las normas que exige el Fondo Monetario Internacional, así como las controvertidas reformas constitucionales promovidas por el Ejecutivo sobre ratificaciones de ministros.
Agencia Latinoamericana y Caribeña de Comunicación (ALC)
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